viernes, 27 de febrero de 2009

Contestador...

Es muy lindo encontrar el amor, y mucho más cuando te corresponde. Es una sensación hermosa comparable únicamente a empacharte con leche condensada. Si le damos tiempo y aplicamos algo de ganas y compromiso, ese amor florecerá y nos dará frutos. Luego morirá indefectiblemente.
Nada es para siempre, como dice la canción, eso lo tengo claro. Tarde o temprano el sortilegio se romperá, ya sea por hartazgo, saturación, celos o simplemente muerte de alguno de los implicados. Nada es para siempre, y lo entiendo, lo acepto. Lo que no comprendo es por qué hay personas que se esfuerzan para acelerar el proceso de descomposición. Ejemplo: te mudás con tu pareja, alquilan un departamento en caballito, 2x2 y sin ventilación (olvidate de la luz natural). El "balcón", que los pone tan orgullosos, tiene dos azulejos de ancho y la humedad del baño es tal que para bañarte basta con pasar la mano por la pared y lavarte con el agua que sacás de ahí. Como si eso fuese poco, te comprás un teléfono inalámbrico con contestador, de esos que le tenés que grabar un mensaje arriba. Dicho mensaje resulta más o menos así en la mayoría de los casos: "Te comunicaste con el -inserte número de teléfono aquí-, en este momento no podemos atender, deja tu mensaje después de la señal". Simple, claro y conciso ("Somos nosotros, no te queremos atender o realmente nos fuimos a hacer otra cosa más entretenida que hablar con vos y, si querés, podés dejar un mensaje que en una de esas escucharemos cuando volvamos. En caso de que lo escuchemos, podríamos llegar a contestarte el llamado si está lloviendo Y se cortó el cable -énfasis en la "Y"-). Eso es un mensaje como la gente. Ahora ¿por qué hay personas que hacen ESTO? (preparense porque es heavy): "¡Hola! Somos Pau y Pachu, ahora salimos pero podés dejar un mensaje después del bip que te llamamos después, besitos".
Dolor es lo único que le deseo a estas personas. Elementos dentro del mensaje que elevan el nivel de Ira en Sangre:
1- el saludo rebosante de énfasis ("¡HOLA! ¡Por Dios, qué felicidad me produce NO estar para atenderte! ¡Me tomé 18 bebidas energizántes antes de grabar esto!")
2- la presentación (¿Qué necesidad hay de decir nombres? Es un número de teléfono, dejalo ser así. Y si vas a apropiarte de su identidad, no lo hagas con diminutivos o sobrenombres, a la mitad de la gente que te llama le chupa un huevo cómo te dicen tus amigos... posta)
3- descripción del itinerario (el "ahora salimos" es una de las frases más livianas que te podés encontrar. Hay veces que los dueños de casa se pasan varios minutos relatando qué están haciendo. "Salimos a comer", "Nos fuimos de pic-nic", "Estamos en el Parque de la Costa")
4- el bip (Por favor, por lo que más quieran, no intenten imitar los sonidos de una máquina. Que seas un aparato no significa que puedas emular a uno)
5- la promesa de respuesta (No digas que después me llamás porque seguramente voy a tener que llamarte de nuevo yo. Esto sólo trae problemas y excusas inventadas en el momento)
-"Ay, cierto, no te llamamos porque... Se murió mi hermana"
-"¿No sos hija única?"
-"... Ahora si"
6- el cierre (No digas besitos. Las mujeres y los hombres no saludan de la misma manera. Que una chica diga "besitos" es normal. Que un hombre diga "un abrazo" es normal. Si el mensaje es compartido no hay forma de que ambos queden bien parados en una situación así. "Besitos" te amputa los huevos y "Un abrazo" tira machona. Simplemente... no)

Conclusión: no aceleren los procesos, no hechen a perder algo que podría haber sido hermoso simplemente por apuro.
Y si lo hacen, no se la agarren con su contestador.
Gracias por leer.

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