jueves, 26 de febrero de 2009
Nace la Ley del Menor Esfuerzo
Esta primer entrada (así se llaman los posts de los blogs... si, yo tampoco lo entiendo. Entradas tiene el marido de mi vieja en la cabeza. Bah, entradas, salidas, salidas de emergencia. Todo tiene, pobre) está destinada a saludar (porque así se dice cuando querés felicitar algo. "Algo" como en "cosa", porque cuando querés felicitar a alguien simplemente lo felicitás. O sea: "Quiero tomarme un momento para saludar esta reunión" -léase "Qué lindo que estamos todos acá, compañeros marxistas revolucionarios"- o "Quería felicitarte, Pedro, por haber aprobado biomecánica II, que es una materia medio fulera, tengo entendido -léase "Quién te mandó a estudiar BIOMECÁNICA!? Además hay I Y II!? Me decís que hay III y te ganaste el galardón al traga del año. Conseguite una novia, boludón. Si fuese Mecánica, bueno, o Biología, vaya y pase... Pero quién fue el trastornado que las juntó?") este nuevo espacio de expresión -que es como la gente que escribe en los blogs se refiere a estos mismos. Básicamente porque si tu potencial suegro te pregunta "Y qué haces en tu tiempo libre?" y le contestás "Tengo un blog" te podés ir olvidando de quedarte a dormir bajo su techo. En cambio si decís "Me gusta expresarme, escribo" el tipo va a seguir viéndote con cara de nazi, pero tu novia y la madre van a quedar encantadas- que responde al nombre de La Ley del Menor Esfuerzo ("responde a" es una forma de decir... si el coso este me respondiera se lo vendo a Bill Gates, me compro una isla y se van todos a cagar) Gracias por leer.
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